La princesa de papá
Annie: No soy de esas
chicas que se basan en canciones para escribir capítulos, pero todo este tiempo
estuve bloqueada y mi gradiosa sisterFifty, Pame, me ayudó a tumbar algunos de
los ladrillos que bloqueaban mi mente, así que este capi va dedicado a Pamela,
pero lo que hizo que ese muro se destruya completamente y pueda escribir este
capi fue la canción de Miley Cyrus buttom
of the ocean, así que si son de las personas que leen con música pueden
hacerlo con esta.
Sin más preámbulos les dejo el
capi.
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¾
Ahora sí vida mía, es hora de dormir la siesta –
la coloqué en el moisés que ahora tiene su lugar en la cocina.
Lo sé, es estúpido que el moisés esté en la cocina, se
supone que su lugar era en mi habitación, cerca de mi cama, pero aún sentía que
nos separaban kilómetros de distancia y necesitaba tenerla cerca de mí,
cerciorarme si respiraba ¿¡y si le daba fiebre mientras dormía y yo no me daba
cuenta a tiempo!? Además, el moisés es chiquito y mi cama enorme… También estaba
de por medio el hecho de que cuando estaba en la cocina, que se encuentra en la
planta baja y en la cual paso mucho tiempo, debía subir corriendo cada vez que
la escuchaba llorar por el monitor de bebés y sentía el mismo temor: nos
separaban kilómetros de distancia y necesitaba tenerla cerca de mí, cerciorarme
si respiraba ¿¡y si le daba fiebre mientras dormía y yo no me daba cuenta a
tiempo!? Además, el moisés es chiquito y la cocina grande ¿cierto?
En fin, ahora mis hermanos me habían puesto el sobrenombre
de “mamá osa”. No soy sobre protectora, el hecho de que dejo que la carguen
ellos por más de dos minutos lo demuestra.
¡Diablos! ¡Tienen
razón! Soy una mamá osa.
¾
Señora osa – Saludó Taylor entrando a la cocina.
¾
¡Shhh! – lo callé de inmediato – se acaba de
dormir – apunté hacia el moisés.
¾
Lo siento – susurró - ¿Qué cocinarás?
¾
Estoy pensando en una lasaña.
¾
Entonces me quedo a comer – puse los ojos en
blanco y sonreí.
[…]
¾
¿No crees que el chupón es demasiado grande? –
Cj se encontraba observando atentamente a una dormida Zoé.
¾
¿Tú crees? – le pregunté alarmada.
¾
¡Basta Cj! – le riñó Suzie – vas a hacer que a
la pobre mujer le dé un infarto. Y ya sabes que no es nada sobreprotectora con
la bebé – tiró un sarcasmo al cual le di nula atención, en mi mente estaban las
palabras de mi amigo “Chupón demasiado grande”.
¾
Tienes razón ¿Tú crees que no la deja respirar
bien?
Cj se encogió de hombros ¡Mierda! ¿Qué hago?
Intentando no despertarla empecé a sacarle lentamente el
chupete, pero ni bien tiré poquito ella empezó a succionarlo con fuerza. ¡Vamos
Zoé, suéltalo, solo quiero quitar esta cosa que muy probablemente no te deja
respirar!
Dejó de succionar y volví a mi trabajo. Estaba a punto de
lograrlo cuando el timbre sonó asustándome haciendo que tire rápidamente el
chupón y despertando a mi hija.
Zoé empezó a llorar.
¡Mato al hijo de perra que se atrevió a tocar el timbre
ahora!
Suzie vio mi cara de pocos amigos y fue a ver quién era ese
osado.
Levanto a mi hija del moisés y comienzo a mecerla en mis
brazos pero no se calma. Me siento, le ofrezco mi pecho, succiona dos veces y
lo deja volviendo al llanto.
¾
Ya mi amor, te prometo que mataré a esa persona
que osó interrumpir tu sueño.
¾
¿Incluso si ese es su propio padre? – cuestionó Cj.
¿A qué vino esa pregunta?
Levanto mi rostro para responderle y me encuentro con Robert
en el marco de la puerta.
Mi seño se frunció y si las miradas matasen él ya estuviera
carbonizado.
¿Quién mierdas se creía para venir y despertar a mi hija?
¾
¿Qué haces aquí? – fui lo más directa.
¾
A visitar a mi hija – respondió poniendo los
ojos en blanco.
¾
¿Acaso no fui clara ayer?
¾
¿Acaso no fui claro ayer? – enarcó una ceja.
¡Dios mío! Odio que haga eso ¿Por qué tiene que ser tan
infantil repitiendo mis preguntas? ¿Por qué no se marcha y se olvida de Zoé
como el cretino que es? ¿No creía que era su hija cierto, entonces por qué
mierdas quiere creerlo ahora? ¿Por qué tiene que copiar mi gesto de enarcar la
ceja sabiendo que así se ve tan endemoniadamente sexy? Y esos pantalones jeans
negros que cuelgan de sus caderas acompañados por esa camiseta blanca que se
marca en su abdomen…
¡Mierda Stewart! ¡Reacciona!
¾
Tú solo vienes a arruinar nuestras vidas –
aparté mi mirada de la suya y la enfoqué en mi hija quien sigue llorando.
¾
¿Qué tiene? – preguntó alarmado.
¾
¿Quieres saber que tiene? Pues, tiene a un
idiota como padre, el cual la despierta de su siesta y la hace llorar del
susto.
Sus ojos se pusieron llorosos. Esto le dolió.
Recuerdo que cuando empezamos a grabar crepúsculo y terminé
como Mike para estar con él, no quería hijos, es más, cuando empezamos a tener
relaciones nos cuidábamos el triple, el usaba condón, yo tomaba las pastillas y
utilizábamos hasta el método del ritmo. Cuando íbamos grabando amanecer todo
cambió, le encantaba verme con la barriga que me ponían, habíamos hablado de un
futuro, sobre todo cuando empezamos a grabar con niños pequeños. Amaba jugar
con Macquenzie. Y dejamos de ir utilizando nuestros métodos anticonceptivos,
primero se fue el condón, luego empecé a tomar las tabletas desordenadamente,
un día sí, otro no, uno sí, dos no, uno sí, tres no, hasta que llegué a
olvidarme completamente de tomarlas… al fin de cuentas estábamos aún con el del
ritmo ¿Cierto?
No estábamos buscando un bebé en ese tiempo… bueno, no un conscientemente, pero muy en el fondo ambos deseábamos que pasara. Y pasó, y las malditas hormonas me traicionaron en Londres…
No estábamos buscando un bebé en ese tiempo… bueno, no un conscientemente, pero muy en el fondo ambos deseábamos que pasara. Y pasó, y las malditas hormonas me traicionaron en Londres…
Había ya pasado tiempo que no veía a Rob, él estaba ocupado
con sus proyectos y yo como SWATH, el stress me estaba matando hasta el punto
de que no me venía la regla y para colmarla, salían chismes de Robert en la tv
y revistas donde mostraban imágenes de él compartiendo con otra persona. Sabía
que eran cenas de trabajo, lo sabía, pero las hormonas del embarazo, del cual
aún no sabía, me estaban haciendo una mala jugada y pasó…
Y ahora eh me aquí tratando de calmar a mi pequeña que llora
a mares bajo la triste mirada de su padre.
¾
Kristen – se aclaró la garganta Suzie – por qué
no dejas que él intente calmar a Zoé ya que fue el responsable de que ella esté
llorando.
Lo miré con desconfianza, él tenía un pequeño brillo en los
ojos, lo ilusionó poder cargar a su hija. Cj me apretó la pierna para darme ánimos
y decirme que estaba bien lo que iba a hacer.
Me acerco a él y veo como tiene una batalla entre él y sus
brazos. No sabe cómo cargar a Zoé.
Cj y Suzie se rieron y él los fulminó con la mirada.
¾
Su, ayúdale con sus brazos – le ordené.
Mi amiga lo hizo sin chistar y posé a mi hija en la cuna que
formaban los brazos de su padre.
¾
¡Oh mi Dios! – susurró bajo.
Robert la apegó a su pecho, sobre su corazón y le dio un
beso en su frente.
¾
Ya princesita de papi, deja de llorar – la meció
– papi está aquí, por fin, contigo – Zoé fue disminuyendo su llanto de a poco –
eres hermosa, como tu mami – las palabras salieron solas de su boca y al darse
cuenta de lo que había dicho me miró.
Yo le respondí la mirada con los ojos entrecerrados.
Zoé se calmó completamente y abrió sus pequeños ojos. La
cara de Rob se iluminó al ver el color de éstos.
¾
Tiene mis ojos – sonrió como estúpido.
¾
Y tus dos lunares del cuello – acotó Cj
ganándose un codazo de mi parte.
De por sí ya se le había subido el ego con el color de ojos,
saber que hasta detalles casi insignificantes como sus lunares iban a llevarlo
al cielo.
¾
Mi princesa – sonreía de oreja a oreja – papi promete
que a pesar de lo estúpido que fue, suele ser y probablemente seguirá siendo,
jamás te abandonará, puedes contar conmigo para todo.
Lágrimas traicioneras comenzaron a salir de mis ojos, las cuales
fueron limpiadas rápidamente.
¾
¿Hasta cuando se quiera fugar con el novio a
alguna fiesta? – lo provocó Cj.
¾
Eso nunca – lo miró con los ojos a punto de
dispararle balas si fuera posible.
Todos reímos.
A pesar de la molestia que permanece en mí cuando no creyó
que Zoé era su hija, al verlo así, con ella en brazos me di cuenta que sería un
buen papá, aunque eso ya lo había demostrado en las grabaciones, cuando jugaba
con las niñas que hacían de las edades de Renesmee, sobre todo con la bebé.
¾
Papi no quisiera separarse de ti nunca – la volvió
a besar – papi pasó por una tiendo y con ayuda de la encargada escogió muchas
cositas para ti y te las trajo.
Suzie me pasó diez bolsas llenas de diferentes cosas como
pañales, biberones especiales, conjuntos, vestidos, sandalias, gorros,
agarrapelos y unas pequeñas convers rojas.
Mientras yo miraba todas las cosas, algunas de su talla y
otras como las convers un poco más grandes él le seguía hablando, y al parecer
ella lo escuchaba atentamente porque no apartaba los ojos de él.
¾
Papá vendrá todos los días a verte ¿Te agrada la
idea?
¾
¡No! – grité enseguida asustando a Zoé que
volvió a llorar.
¾
¡La hiciste llorar! – Rob me fulminó con la
mirada y empezó a mecerla. Cuando la hubo calmado se dirigió a mí – ¿Quién te
crees para prohibirme ver a mi hija?
¾
No te lo estoy prohibiendo – me defendí –
simplemente no tiene que ser todos los días.
¾
¿Por qué?
Porque tu presencia me distrae, tus ojos me derriten, tu
aroma me hace desearte, pero recuerdo cómo la rechazaste, me rechazaste y no
quisiste escuchar nada y mi corazón de quiebra. Porque simplemente te has
convertido en la persona que amo pero que no quiero ver.
¾
Porque… tú después vas a tener una novia con la
cual formalizarás, te casarás, tendrás hijos y te olvidarás de Zoé. Así que, es
mejor que no tenga un lazo muy fuerte contigo para que cuando la hagas a un
lado no sufra.
¾
Eso nunca pasará Kristen.
¾
Eso dices ahora – miré el reloj. Las 6 pm. Saco a
mi hija de sus brazos con cuidado – es hora de su baño – aclaro cuando veo sus
ojos marcados por la desilusión.
Subo a Zoé a su habitación y los dejo en la cocina dejando
por terminada esa discusión.
*-* me encanto el cap, me gustó como rob trataba zoé pero entiendo a kristen, actualiza pronto ;)
ResponderEliminarMuy buena historia, espero que la actualicen prontoo...!!
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